Muy buenos días…
En primer lugar, les agradezco la oportunidad que cotidianamente, nos han dado para poder comunicarles de primera mano la evolución del Covid-19 en el estado. Nos hemos adelantado en los planes de reconversión hospitalaria, en la atención intrahospitalaria, pero eso no significa que deseemos que haya pacientes graves.
Esta enfermedad representa uno de los más grandes retos de la historia reciente para todos. Tanto para la sociedad en su conjunto, como para el sistema de salud del mundo y por supuesto, el de nuestro país.
Para Campeche esta semana es crucial para prevenir la dispersión acelerada de contagios. Y la mejor manera de parar esta emergencia es en estos momentos ¡quedándonos en casa!
La decisión del gobernador Carlos Miguel Aysa González de suspender de manera indefinida las labores administrativas del Poder Ejecutivo del Estado, es una acción acorde al panorama epidemiológico de México y Campeche y un acto de la más alta responsabilidad en protección de la salud de los ciudadanos.
No es la situación de muchos trabajadores del sector salud que nos quedamos al frente, salvaguardando la seguridad y bienestar de miles y miles de familias. No minimicemos o desestimemos ese trabajo.
Nada me daría más gusto que todos mis compañeros se fueran a casa, pero tenemos una obligación por la cual nos hemos preparado toda la vida, que es procurar la salud de los habitantes sin distingos y de manera oportuna. Pero no lo lograremos si ustedes, si todos, no cumplimos con nuestra parte.
Muchos de ustedes que nos ven, escuchan o leen saben que los sistemas de salud construyen su infraestructura a partir de las necesidades habituales de la sociedad, anticipando por supuesto una demanda a futuro, a mediano y en ocasiones a largo plazo.
Por ello, circunstancias como las que ahora enfrentamos, cimbran al sistema, lo presionan y lo obligan a poner en juego todos sus recursos. A disponer de sus capacidades al máximo para garantizar la seguridad de los pacientes que consultan y que ingresan de manera habitual.
Pero también, en este escenario, al reconvertir instalaciones para enfrentar la contingencia y a considerar una reserva estratégica, ante la incertidumbre del tiempo y permanencia de la epidemia.
Pues no hay que olvidar que apenas el 31 de diciembre, conocimos el primer caso de Covid 19 en el mundo. Campeche se ha preparado… y se sigue preparando.
El sector salud ha estado actuando en atención a los escenarios epidemiológico, es decir, que el comportamiento del Covid 19, está definiendo nuestra estrategia.
Es cierto, si, los campechanos estamos habituados a la cultura del agua, lluvias, cielo nublado, huracanes, inundaciones, árboles caídos, interrupción en la energía eléctrica, emergencias climatológicas que nos obligan dada sus características a mantenernos en casa.
Sin embargo, el enemigo en esta ocasión no es el mal clima, esta vez el enemigo se ubica en la concentración masiva de las personas, en la saliva cuando hablamos, estornudamos, tosemos, cuando nos sacudimos la nariz o cuando no nos lavamos las manos.
El enemigo es invisible a nuestros ojos. No podemos predecir día y hora de su llegada, como en otras situaciones.
Quiero decirles que el sector salud no desatiende su responsabilidad, pero no podemos poner a un médico, enfermera, especialista por cada ciudadano para que vigile que se cumplan con las recomendaciones, esta es una responsabilidad individual con un beneficio colectivo.
Este es el momento en que no debemos menospreciar lo que no cuesta. Lo que es gratuito, lo que solo requiere voluntad y responsabilidad.
Yo sé que no es fácil, lo sé, para muchos de ustedes hay que salir de casa por necesidad, pero estas medidas de restricción social son acciones de vida para proteger la vida de nuestras familias.
Les pido ser muy honestos para identificar de primera mano los riesgos de esta enfermedad. Si ustedes han viajado a otros estados o país comuníquese con nosotros para poder identificar los síntomas, infórmenos. Actúen por favor, con responsabilidad.
De los líderes de opinión requerimos justo eso:
Responsabilidad y empatía.
En esta crisis sanitaria en que cientos de miles de personas en el mundo han sido afectadas y que solo en México llevamos poco más de mil casos positivos, seamos conscientes y sensibles.
Necesitamos de todas y todos para proteger lo más valioso que tenemos: La salud y vida de nuestras familias.
En esta situación, ningún sistema de salud en el mundo puede garantizar la eliminación de esta epidemia. Estamos trabajando para controlar la dispersión, que no tenga un crecimiento rápido y que los daños a la salud sean los menos considerables, sin embargo, si aplicamos las medidas de prevención parcialmente y consideramos que una semana en asilamiento es suficiente, están poniendo en riesgo su salud y la de muchos ciudadanos.
Nuestra obligación es curar, pero lo que más nos interesa es prevenir para que no se enfermen. Acuérdense que no todo lo hacen las medicinas, el propio organismo va a reaccionar de manera diferente ante una infección, provocando que la enfermedad pueda ser asintomático leve o grave.
Hemos difundido permanentemente las medidas de prevención y la jornada de la sana distancia, pero quizá no hemos llegado o tocado los corazones de todos los campechanos, por eso lo vuelvo a repetir ¡quédate en casa!.
La Secretaría de Salud del Poder Ejecutivo del Estado tiene reforzamiento en los pasos fronterizos, en el acceso a migrantes, en el arribo de jornaleros agrícolas, estudiantes que regresan a la ciudad, en los puntos turísticos de los municipios, así como en las zonas más apartadas de las cabeceras municipales.
No son tiempos de decisiones fáciles. Cada una de las que estamos tomando son pensadas y analizadas. Las fundamos en el estudio de la evolución de la pandemia, en la técnica epidemiológica y en información científica.
Nuestras decisiones se consultan con los altos niveles de las autoridades en el país y en el estado, para ser congruentes, además de responsables con la salud y el bienestar de todos.
Conscientes de que algunas de nuestras decisiones afectan el entorno social y económico, pero, en ocasiones, como ahora, no tenemos más opción que la de ampliar las medidas de contención que recomienda la sana distancia.
Por ello, el día de hoy la junta reguladora amplía la suspensión de actividades para la venta y consumo de bebidas alcohólicas sitios públicos como bares, centros nocturnos, billares, cantinas, entre otros y además en restaurantes se restringe hasta en un 50 por ciento su aforo.
Fomentemos el servicio a domicilio de alimentos y de productos prioritarios.
Quienes no acaten estas disposiciones, asumen el riesgo de la clausura total y permanente de sus giros y negocios.
La mejor prevención en este momento es quedarse en casa.
Recuerda que, si perdemos la salud, lo perdemos todo.
¡Quédate en casa!